Laura. Mi vida en el Mario Benedetti

Laura

Mi vida en el Mario Benedetti

 Aquí estoy yo con mis compañeros Hassnae y Álvaro L.

Me acuerdo de mi primer día de entrada al colegio, tenía miedo, ya que no conocía a nadie y me separaba de la guardería Platero, a la que tanto cariño tenía. Ya en el aula de tres añitos, me senté en el círculo que estaban formando los demás niños y niñas para presentarse. Los primeros días era tímida, pero poco a poco iba cogiendo confianza en todos y todas. Ya me daba menos miedo, me lo pasaba genial con mis compañeros. ¡Eran y siguen siendo geniales!

Uno de los momentos más graciosos que viví en infantil fue con mi profesora Ana, tenía que salir de clase un momento para hablar con otro profesor, entonces dijo: ¡No quiero escuchar ni una mosca! Y todos comenzamos a hacer zumbidos. ¡Fue súper gracioso! Aunque la bronca que nos echó después no fue muy graciosa, la verdad.

Las profesoras que tuve en infantil, fueron increíbles, ¡sin ellas no habría avanzado tanto!

Entré en primaria, no sabía lo que me esperaba por delante. Todo había cambiado completamente, era hora de ponerse las pilas, porque me esperaban muchos deberes y estudios.

En primero, una profesora nueva se presentó, María Francisca Pérez, conocida como Paqui, o conocida como la mejor profesora del mundo. Gracias a ella, he aprendido a sumar, a restar, a hacer operaciones… He aprendido muchísimas cosas, y darle las gracias para mí es poco. Pero no solo a Paqui, sino a todos los profesores, que no puedo decir nada negativo de ellos.

Cuando pasé a cuarto, Pedro, nuestro profesor de tercero, nos anunció un proyecto llamado LOVA. Nunca me olvidaré de ese día, en el que nos pusimos en círculo y Pedro fue nombrando a quienes eran compositores, escenógrafos, electricistas, etc.

No olvidaré cuando Pedro dijo esas dos palabras que me pusieron los pelos de punta: ‘’Laura, actriz’’.

Nunca voy a olvidar el ponerme la mochila a la espalda, el llegar al colegio a las 8:50, esperar en las escaleras con mis amigas/os para entrar. Tampoco, subir las escaleras y, como siempre, ver a José Manuel y a Lorenzo apoyados en la barra esperando a sus alumnos.

Las clases de José Manuel, entre risas, son increíbles.

Esperar quince minutos para bajar a Educación Física con Antonio.

Hacer un montón de actividades en Música con Pedro

Hacer las tejas con Charo en Plástica…

¡Un montón de cosas que no olvidaré de mi vida en el Mario Benedetti!

Redactora: Laura

Las fotos de abajo son del curso 2007-2008.

 
Editado con Kizoa por Laura